miércoles, 13 de enero de 2010

FUTURO COCINERO

El amor es extraño, podemos amar mucho y a muchas personas a la vez, pero eso lo descubrimos tarde, cuando olvidamos el amor usura o nos desnudamos del amor en propiedad, seguro, avaro, miedoso, cuando descubrimos el amor que nos conmueve, nos moja de ternura o de deseo o de sueños en total libertad.

Dar amor es fácil, pero recibir amor implica aprendizajes, secretos, tacto. Josep Plá habla mucho de cómo amor y cocina van siempre de la mano y lo uno es imposible sin lo otro. He cocinado mucho para mis hijos, recuerdo esas simples patatas guisadas con pescado blanco que era el primer menú sólido de Iker cuando era bebé y tenía menos de un año.

Guillermo me besa, me abraza y me dice “¿sabes?, te quiero mucho papá” y el mundo se convierte en otra cosa. Sus palabras me calientan por dentro muchas horas. Siempre que estamos juntos se pone a cocinar conmigo y lo hace bien, cada vez mejor. No dudo, tengo la certeza, de que será un buen cocinero. Mucho mejor que yo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario